Todo partió de una inquietante idea filtrada en mi cabeza: «¡En Valladolid nunca sucede nada!»
Entonces, sentí que debían existir personas que se levantasen cada día para crear sus sueños y me interesé por conocerlas. ¿Se dedicarían a ello sin darle importancia, o sería algo fundamental para poder existir en el mundo?
Reconozco y admiro la dificultad de concebir lo único y original, así como la preparación y formación necesarias para su ejecución.
¡El archivo me descubrió a personas increíbles!
A veces anónimas y, otras, reconocidas
y reconocibles, que podrían servir de inspiración.
Doté de vida virtual a mi idea
el 1 de enero de 2012. Salí a buscar a mis «Vallilustres» con gran ilusión y, desde entonces,
he tratado de crear y difundir este trabajo documental, de forma altruista,
enfocado a todos los públicos y edades.
¡Deseo que os guste!
Sé que muchas caras os resultarán familiares,
pero os invito a conocer todas las historias,
ya que trasmiten, con su relato, ejemplos
de cómo llevar a cabo los sueños más hermosos.
Espero que acojáis mi labor
con el mismo cariño que pongo al realizarla.
Un saludo,
Mr. Vallilustre
